Los recientes terremotos en Perú y Chile ponen sobre la mesa la interrogante de siempre: ¿está el país preparado para enfrentar un sismo fuerte?, ¿funcionarían los planes de evacuación en los edificios públicos y privados? y ¿evitarían estos planes de emergencia que los errores se contabilicen en víctimas?
Guatemala se encuentra en un área de mucho riesgo, pues se trata de una zona altamente sísmica atravesada por tres fallas tectónicas, además de ser un territorio propenso al embate de ciclones y tormentas tropicales. Si a estos riesgos se le suma que muchas de las edificaciones de la ciudad no cumplen con las normas mínimas de seguridad y algunas que sí las tienen no implementan planes de emergencia y evacuación eficientes, los riesgos aumentan.
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